La mayoría de los materiales plásticos presentan una resistencia al rayado limitada cuando se comparan con otros materiales como los cerámicos, vidrio o metales. Para solucionar este problema en superficies poliméricas, se investigan actualmente diferentes tecnologías. Por lo general, un enfoque aceptado es el uso de recubrimientos o laminados. Otra posibilidad se basa en el uso de cargas (wollastonita, nanoarcillas) agentes de slip o aditivos basados en silicona. Sin embargo, ninguno de estos métodos actuales es completamente satisfactorio.